La Iniciación al lenguaje, la teoría y la escritura musical más fácil, creativa y pedagógica para el comienzo de los más pequeños.

Basado en los sistemas más modernos y avanzados en pedagogía musical: Orff, Kódaly, Dalcrozer, etc.

Nuestra colección Aprender jugando La Música, facilita al niño el aprendizaje de las primeras nociones musicales de una forma más amena y razonada a través de una intervención activa de diseño y dibujos muy fáciles de comprender.

LA EDUCACIÓN MUSICAL DE LOS NIÑOS

La iniciación a la música de los más pequeños, es la etapa más difícil y la que entraña mayor responsabilidad pedagógica por parte del profesor y también para el futuro musical del niño, tanto si va a ser un profesional como si sólo intentamos que ame la música.

La cuestión está en que sepamos aprovechar esa etapa para lograr por lo menos, futuros amantes de la música, o por el contrario, que no consigamos ni una cosa ni otra y convirtamos al niño en un ser indiferente a la música para el resto de sus días.

A veces nos empeñamos en hacer músicos desde la iniciación, forzando sus conocimientos teóricos y técnicos – como nos hacían a nosotros de pequeños – cuando todos estos principios han evolucionado pedagógicamente hacia una forma más distendida y amena.

¿Por qué tenemos que pretender que todos los niños que se inician en el dibujo vayan a ser pintores profesionales?

Ya vendrá el momento en que el propio niño se defina, o se incline hacia la música como profesión, pero hasta entonces no le maltratemos con excesivos conocimientos técnicos y definiciones academicistas, que después no le servirán para nada si no se decide por ser músico profesional.

¿Cómo facilitar a los niños una educación musical más amena, razonada y comprensible?

Este ha sido siempre un tema muy debatido entre los profesores de música.

Los grandes maestros como KODALY, ORFF, DALCROZE, etc… Se encontraron con la necesidad de facilitar a los niños unos principios más razonados y comprensibles que las antiguas teorías y libros de solfeo cargadas de tecnicismos que sólo servían para aburrir y dificultar la iniciación de los pequeños a la Educación Musical.

Estos grandes pedagogos crearon sus propios sistemas, coincidiendo todos ellos en que uno de los elementos de mayor interés para el desarrollo de la enseñanza musical es el canto. (En los volúmenes 1ºA y 2ºA de nuestra colección Aprender jugando la música, se trata la entonación, donde se encuentran los cantos populares)

Ya nadie duda de que la canción popular puede servir como base para la práctica de las siguientes actividades: lectura y escritura musical, entonación, medida, ritmo, dictado, canto, improvisación, prosodia e instrumento.

Bartok y Kodaly recopilaron juntos el folklore de su país, para después acoplarlo como lecciones para el Lenguaje Musical. En nuestro folklore abundan las canciones para poder hacer una buena selección de acuerdo a las necesidades técnicas de cada momento.

Y todo ello, desglosando al máximo cada nueva materia solfística que se va presentando.

Entre tanto, si conseguimos que nuestros alumnos amen la música, habremos logrado lo más importante.